Alexander Wang ya ha sido considerado por la revista Forbes como el multimillonario más joven del mundo en crear su propia fortuna. Para muchos, se trata de la punta de lanza de una nueva generación de multimillonarios tecnológicos que viene a desplazar a los nombres ya conocidos por todos.
Sin embargo, al tratarse de una persona joven que lleva poco tiempo en el mercado, aún no se conocen muchas cosas sobre su trayectoria. Vamos a tratar de averiguar algo más.
¿De dónde viene?
En la actualidad Alexander Wang tiene 25 años y su fortuna personal ya se calcula en billones de dólares.
Hijo de inmigrantes, desde pequeño mostró mucho interés en la tecnología y en la programación. En varias ocasiones ha manifestado que llegó a la programación por el convencimiento de que servía para mejorar lo que sus padres ya habían comenzado y como un convencimiento de que a través de la programación se pueden mejorar muchos aspectos de la vida.
Como ocurre con algunos de los multimillonarios digitales más conocidos, también Wang abandonó sus estudios universitarios al poco tiempo de comenzarlos. Sin embargo, el MIT le sirvió para desarrollar la idea que al final le ha llevado al éxito.
La anécdota de esta idea no tiene desperdicio: el ahora multimillonario, entonces estudiante, pensaba que una de sus compañeros de piso le robaba comida de la nevera. Para tratar de localizarlo instaló una cámara que grababa de manera constante lo que ocurría en la nevera. También, pensó, podría ser una buena idea para controlar el flujo de datos sobre la necesidad de comprar y reponer productos.
No consiguió localizar al ladrón, pero, a través de la idea de organizar los datos de una gran cantidad de horas de grabación, surgió el proyecto de Scale.
Scale el nuevo unicornio del mercado tecnológico
Con tan sólo 19 años, decide fundar Scale. La empresa se enfocó en el tratamiento de datos y la inteligencia artificial con una fuerte orientación a optimizar el tratamiento de gran cantidad de datos.
El éxito de la empresa es tal que de ámbitos tan diferentes como el tecnológico, el industrial o el alimentario, ya han confiado en sus recursos. Casos como el de General Motors, cliente de Scale, son paradigmáticos de cómo a las grandes compañías les encaja este tipo de soluciones que les permite tomar decisiones basadas en una mejor comprensión de los datos.
La empresa ha superado una valoración cercana a los 8000 millones de dólares. El porcentaje de accionariado de Wang ronda el 15% lo cual hace que la valoración de la fortuna de este joven empresario supere los 1.000.000.000 $.
Pero, más aún, según todos los analistas estamos ante uno de esos casos de empresario tecnológico de gran proyección. ¿Superará a Elon Musk? Aún estamos lejos para saberlo, pero, desde luego es uno de esos actores tecnológicos que deberemos tener en cuenta los próximos años.