Meses sin intereses

Es bueno conocer la verdad sobre los meses sin intereses. El método de pago de los meses sin intereses suscita recelos en todo México, y no hay duda de ello. Y es que suena muy bien eso de pagar una compra en cuotas, sin coste adicional alguno en términos de intereses. La principal duda es evidente: ¿Qué gana el banco con eso?

Una tarjeta de crédito es un producto financiero y, como tal, tiene como meta generar beneficios a la entidad emisora de la misma. Así que las dudas están justificadas, de alguna manera nos da la impresión de que hay gato encerrado, y nos da esta impresión porque nos resulta inconcebible que un banco sea tan benévolo y nos haga el favor de pagar a plazos nuestras compras, sin coste adicional en términos de intereses.

Las tarjetas de crédito nos ofrecen la posibilidad de comprar mediante la modalidad de meses sin intereses, y decíamos en el párrafo precedente que esto suscita dudas y temores. De alguna manera tendrá que obtener beneficios el banco a través de nuestras transacciones comerciales. La intuición es correcta. El banco, en efecto, consigue un beneficio a través de nuestras compras realizadas mediante esta modalidad. Pero, ¿cómo? ¿No pagamos intereses y el banco se sigue beneficiando?

La duda aún podría persistir: aparentemente no pagamos intereses, pero están ocultos. O tal vez hay letra pequeña… Bueno, la hay. Si no puedes pagar las cuotas, entonces se te sumarán unos intereses mínimos marcados por el banco, en concepto de demora.

La compra mediante esta modalidad está cargada de peligros, sobre todo teniendo en cuenta que en México se está promocionando comercialmente la compra mediante meses sin intereses de productos de todo tipo, incluso de alimentos.

El problema es la carga en las tarjetas de crédito de múltiples compras a meses sin intereses. En este caso corremos el peligro de caer en una dinámica de deuda crediticia, que haga que finalmente las compras a meses sin intereses no sean tales, pues a costa de acumular pequeñas deudas, podríamos perder nuestra capacidad de hacerles frente. Es aquí donde nos atrapa el banco.

Un problema asociado al anterior, consiste en el negativo hábito de utilizar más de una tarjeta de crédito. En este caso, caer en la mencionada espiral de deuda es más fácil. Cualquier banco intentará en todo momento convencernos de que tener varias tarjetas no será un problema.

Las 5 cosas que hay que tener claras sobre los meses sin intereses

El pago a plazos es visto por muchos mexicanos como una bendición. No lo es. Si pensamos en la cantidad de intereses que se pueden llegar a pagar, el pago a plazos es una maldición. Recientemente, se ha comenzado a extender por México el pago a meses sin intereses.

Se trata de una forma de compra con tarjetas de crédito, que nos permite pagar nuestras compras en cómodas cuotas, sin pagar intereses adicionales. Bien, dicho así suena bastante bien, sin embargo, si no tienes cuidado tu capacidad de endeudamiento podría ser fácilmente rebasada, acabando por pagar grandes cantidades en concepto de intereses de demora. A continuación enumeramos las cinco cosas a tener en cuenta sobre los meses sin intereses.

1- No multipliques las posibilidades y oportunidades de comprar mediante esta modalidad. No tengas más de una tarjeta de crédito.

2- No pagues mediante los meses sin intereses, todas las compras que puedas pagar mediante esta modalidad. En efecto, es recomendable pagar en efectivo aquellos productos cuya duración es igual o inferior al número de cuotas totales que necesitamos abonar para pagarlo.

3- Si compras a crédito, la compra a meses sin intereses se comerá del mismo un importe igual al precio del producto que compres. Esto es, si tienes en la tarjeta un crédito de 12.000 pesos, y compras a meses sin intereses un producto de 9.000 pesos, no dispondrás de un importe equivalente a la diferencia de los 12.000 pesos y la primera cuota que pagues, sino que se te cargará el precio total del producto, es decir, que tendrás desde el primer momento un crédito de 3.000 pesos.

4- No hagas más compras de las necesarias en esta modalidad. Una o dos cuotas pueden ser fácilmente asumidas; muchas más pueden constituir un suicidio financiero. Si no tenemos cuidado con este punto, las compras a meses sin intereses pueden convertirse en la peor de nuestras pesadillas financieras.

5- Si no puedes asumir tus deudas, entonces los meses sin intereses se convertirán en meses con intereses. Y es que tienes que tener en mente que se trata de una estrategia comercial, pensada para que el cliente haga múltiples compras en esta modalidad, de tal manera que termine endeudándose. Así, a medio y largo plazo, el usuario de la tarjeta terminará pagando intereses en concepto de demora de sus cuotas impagadas.

Publicidad