Aunque el 2010 ha sido un año con un buen desempeño en la industria del calzado, los nuevos retos para el 2011 serán más fuertes debido a la entrada del calzado proveniente de China.
Ambos países imponen aranceles
El gravamen que se deberá pagar por importación de calzado chino será del 30 por ciento, sin embargo, China tendrá un arancel de 42 por ciento para el calzado mexicano. Desde ahí podemos identificar una falla, pues los chinos tienen más posibilidad de competir en el mercado mexicano, mientras que para los mexicanos es más difícil competir en el mercado asiático.
Juan Alonso Niño Cota, presidente del Consejo Nacional de la Cámara del Calzado (Concalzado), indicó que la industria zapatera del país tendrá graves problemas, pues con la entrada de los productos orientales, el calzado de México se verá reducido en una tercera parte.
Esta reducción conllevaría a que desaparezcan más de la mitad de las micro y pequeñas empresas del calzado, perdiéndose aproximadamente 100 mil empleos en todo el país.
Niño Cota señaló que “El potencial de China es enorme ya que hoy en día acapara el 67 por ciento del mercado mundial. Su crecimiento lo ha basado en subsidios, prácticas desleales, triangulación, contrabando técnico y piratería”. Aunque esto es cierto y los gobiernos han intentado contrarrestar dichos efectos con la imposición de aranceles o cuotas compensatorias, esto no ha sido suficiente para detener a los asiáticos.
Si no se encuentra o se planea una forma de competirle a la entrada de dicho producto, dentro de cuatro años estaremos hablando de que el calzado chino arrebatará el 52 por ciento del mercado interno del calzado en México.
Para finalizar, el presidente de la Concalzado indicó que se pude competir en calidad y diseño pero no en conductas desleales’, actualmente las ocho mil 900 empresas de este sector en México ofrecen 413 mil empleos.