El efecto bola de nieve para hacer frente a las deudas

El pago de las deudas es, probablemente, uno de los quebraderos de cabeza más comunes en las economías familiares, pero también en las empresas y el conjunto de la sociedad. Hay que tener en cuenta que las deudas pueden llegar a ser el punto complejo con el que se enfrenta realmente cualquier modelo económico.

Por ello, es importante saber que, incluso para algo que puede parecer tan dependiente del impulso y los recursos como es pagar una deuda, hay que tener cierto método.

No existe un único método de afrontar las deudas, además, efectivamente, en muchos casos dependeremos de nuestra capacidad económica para ello. Pero, lo cierto es que dentro de los diferentes métodos que se pueden aplicar el que se denomina bola de nieve puede ser muy útil dependiendo de la situación de la economía familiar o de la empresa.

¿Qué es el efecto bola de nieve en el pago de las deudas?

Para tratar de entender la aplicación del efecto bola de nieve a la deuda podemos, por un momento, abstraernos e imaginar una bola de nieve de verdad. Generalmente, una bola de nieve se originará a partir de una pequeña cantidad de nieve que al rodar va dejando que se adhiera más hasta crecer de manera exponencial según la velocidad.

Esta es la idea básica a la hora de afrontar las deudas con el efecto bola de nieve. En primer lugar, debemos afrontar la deuda más pequeña.

Imaginemos que tenemos diferentes deudas financieras, para aplicar el efecto bola de nieve deberíamos elegir aquella de menor importe para liquidarla y, de este modo, liberar el pago parcial para destinarlo a pagar otra deuda (la siguiente en importe).

Por tanto, en lo que se basaría el método es en el hecho de ir liberando cantidades que se vayan utilizando para el pago de diferentes deudas de manera gradual.

Esto lo que obliga es a un proceso de negociación importante. Hay que tener en cuenta que, si queremos poner el foco en los pagos para liquidarlos con carácter total, probablemente, debamos dejar de aportar a otros pagos de manera temporal. Por tanto, lo que implica es que siempre se debe tener la capacidad y el margen de maniobra para negociar con las entidades los aplazamientos de pago o la reducción de cuotas (e incluso renegociar la deuda).

Por otro lado, para poder aplicar de manera eficaz la bola de nieve a tus deudas, obviamente necesitas un buen estudio económico de las mismas y de tu situación actual. Hay que pensar que se trata de un periodo de esfuerzo en el cual, al ir liquidando las deudas menores, poco a poco la economía irá ganando profundidad permitiéndote una situación más desahogada. Pero, en el proceso, encontrarás un periodo duro en el cual debes dedicar una buena parte de tus ingresos al pago de deuda.

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